Historias personales

Si todavía no está seguro de qué opciones de almacenamiento de armas de fuego serían las mejores para usted o su familia durante esta etapa de la vida, puede leer acerca de lo que ha funcionado para otras personas:


Alonso, de 72 años, es un veterano de la guerra de Vietnam que colecciona y disfruta de las armas de fuego. Tiene una leve demencia y quiere mantener sus armas en casa. A medida que ha ido envejeciendo, su familia ha notado cambios en su estado de ánimo, en el habla y en la memoria, además de dificultades para recordar dónde están almacenadas sus armas de fuego. Trabajando con su esposa e hijos, ha comenzado a discutir qué métodos de almacenamiento seguro son los mejores para él en estos momentos y qué le gustaría hacer en el futuro, a medida que su enfermedad progresa.

James, de 50 años, vive con su madre Janice, de 77 años, en su casa de los suburbios. Viendo los cambios en el estado mental de su madre, James ha empezado a pensar en cómo guardar sus armas. Después de hacer algunas llamadas y discutirlo con ella, James y Janice están de acuerdo en que es mejor para James almacenar sus armas en un club de tiro local hasta que determinen qué opciones a largo plazo serían las mejores para ambos.


Darryl, de 80 años, ha sido un cazador toda su vida. Recientemente, muchos a su alrededor han visto cambios en su forma de actuar y su comportamiento con las armas de fuego. Un día, Randy, el compañero de caza de Darryl, se sentó con él y discutió cómo podían ayudarle a manejar sus rifles de caza después de su reciente diagnóstico de demencia. Decidieron guardar las armas y municiones de Darryl en la casa de Randy para su seguridad. Hicieron planes para ir de caza juntos una vez al año, pero Darryl está de acuerdo en no volver a ir solo.